“Cuentan que un árbol echó raíces
en tierra infecunda. Las extendía como delgadas extremidades bajo el suelo,
buscaba en lo más profundo con sus dedos de madera para alimentarse de pequeños
cuerpos que marcharon antes de tiempo. Por ventura o por desgracia, de las
ramas del árbol crecieron pequeños fetos idénticos a los que encontraba a
metros bajo tierra; su único alimento.”
Y por fin, después de uno de los
meses más ajetreados que recuerdo en mucho tiempo, puedo por fin dedicar un
poco de tiempo a mis blogs. Debo reconocer que Sin Nombre estará aún unas
semanas sin actividad, pues como sabréis, estoy reescribiendo historias, no
creando. Así que mi atención recae principalmente sobre este blog, al que no he
tratado bien: mi actividad aquí es más intermitente que la carrera de los
Pixies. Pero bueno, siempre he dicho que de sabios es rectificar, y a pesar de
que no prometo nada, quiero pensar que a partir de ahora actualizaré más a
menudo el blog, siempre teniendo claro que esto no deja de ser un hobby. Un
hobby que me da muchas alegrías, para qué engañarnos.
Hoy hago un parón en las listas
que estaba llevando a cabo sobre lo mejor de 2013(tan sólo me queda la de los
10 mejores discos instrumentales, que aún me llevará 2 semanas como poco). Y lo
hago para hacer una recomendación que al principio fue negociada pero que más
adelante fue tomada como algo casi personal: esta banda tiene futuro y presenta
algo novedoso dentro de un panorama español que en el rock está dominado por
Extremoduro(y sus bandas copia) o Mägo de Oz(y cuando quieren sacar algo
decente). Una banda que, si bien está comenzando, se les ve con ganas de ser
escuchados y de traer algo fresco. Desde Villena, Alicante, les presento a
Fetus Tree.
Fetus Tree nace en 2011 en una zona
de España que no está especialmente caracterizada por tener grandes estrellas
dentro del rock, lo cual es un punto muy a favor para ellos. En un panorama en
el que Darknoise ha sido la única banda con algo de proyección junto a Morgana
vs Morgana, que salgan bandas como Fetus Tree resulta un auténtico alivio. Y
antes de pasar a hablar de su música, justifico el porqué: en un país dominado
por el rock urbano, el ya caducado power metal y un thrash metal que jamás ha
encajado(y que no va a encajar), encontrar bandas que jugueteen con el rock
alternativo resulta ya no una novedad, sino una obligación moral que existan.
No obligación de las bandas, sino obligación nuestra como oyentes de apoyarles.
No todas las bandas dejan descargar sus EPs en sus bandcamps, y eso es de
agradecer, y la mejor forma que tenemos de agradecerlo es escuchando,
votándoles para concursos y, sobre todo, recomendando a otros. La industria
musical está muerta, y si no jugamos con el boca a boca(junto con internet)
estas bandas jamás van a tener el reconocimiento que merecen.
Y comenzaba el artículo con un
párrafo sacado de su wordpress, cuya dirección podréis encontrar al final, y
que ilustra la reflexión anterior. Me gusta escuchar este tipo de bandas
nóveles porque, al contrario que con bandas con algo más de seguimiento, vas
sin ningún tipo de opinión predefinida. De esta manera puedes atender sin
prejuicios a todo lo que estás escuchando, volver sobre ello una y otra vez y
analizarlo. Y en muchas ocasiones, me he llevado grandes sorpresas. Y esta
banda es una de ellas.
El caso es que desde 2011 han
estado ensayando, componiendo y trabajando para llevar a cabo lo que ha sido su
EP: Outbreaks, y que, como ya dije, podéis encontrar en su bandcamp y en su
soundcloud. La grabación ha llevado la mano de Toño Martínez, junto con la
mezcla, y la masterización corre de la cuenta de Oscar Albuixech. Este EP
cuenta con tan sólo cuatro canciones. Pero para un primer trabajo y para darse
a conocer son suficientes. Canciones de un metraje asequible, ninguna sobrepasa
los 5 minutos, y encuentro influencias desde cierto indie hasta Pixies o
Smashing Pumpkins. El problema(que no es problema) con esta banda es que no los
puedes encasillar con: “son rock alternativo y punto”, porque se ve que recogen
mucho del rock de Seattle de los 90, si, pero es que también recuerdan a veces
a Cream o a la Velvet Underground(pero sin faltar, Fetus Tree le da mil
vueltas). Llama la atención que, por ejemplo, no incluyan en el EP el tema
Suffering Time, al cual le dieron bastante bombo. Pero, en cuanto a los temas
que encontramos en el EP, encontramos mucha variedad. Por ejemplo, el tema que
abre el EP, Eighteen Roses, comienza muy tranquilo para terminar con una
preponderancia de las guitarras que recuerda a Foo Fighters, fórmula que
emplean bandas como Death Cab for Cutie y que siempre da buenos resultados.
Alex, un tema instrumental si obviamos la parte narrada, sirve de homenaje a
Alexander Supertramp(noes su nombre auténtico), un hombre que abandonó toda una
vida de lujos para comenzar una vida errante, con la única compañía de textos
de Tolstoi y de Thoreau.
En Candle vemos su vena más grunge, se nota que
escuchan Nirvana, y no puedo evitar acordarme de Liam Gallagher con esa forma
de cantar, muy buena. Por último, Keep Floating, con ese comienzo entre blues y
country me hace acordarme de Conway Tweety, se nota que le ponen sentimiento a
la canción, con un final in crescendo para terminar a lo grande. Este es su EP,
a un gran nivel, pero lo cierto es que habla por si sólo. Escuchadle y opinad
vosotros. En su soundcloud tienen demos como la ya mencionada Suffering Time o
Crackman, a la cual dedican una entrada en su wordpress.
Esta banda, con influencias casi
inabarcables, y llevando a gala el término depressive rock, ha editado un EP
que sirve para hacerse una idea de lo que está por venir, y en una escena tan
deprimente como la del rock español actual, queda claro que tienen mucho campo
por el que moverse. Sólo les hace falta confiaren sus bazas y que algún sello
independiente se fije en ellos. Eso, y dar muchos bolos para crear afición.
Pero si siguen a este nivel, y si incluso lo superan, pueden llegar a hacer
algo grande.
Aquí podréis encontrar sus datos
y sus canciones:
https://twitter.com/FetusTree
Fetus Tree son:
Manuel Lagullón – Guitarra, voz, mandolina, armónica
Natalia Albaladejo – Piano, teclados, coros
Joaquín Martínez – Batería, coros
Sergio Sánchez – Bajo
Rubén Navarro – Guitarra